
El cansancio y la fatiga atentan lleva a elegir productos llenos de azúcar y grasas
Hay que tener a la mano, opciones saludables
La prueba de fuego para aquellas que buscan llevar una alimentación responsable, bajar de peso o cuidar lo que comemos, es ese momento del día en que el hambre nos ataca de pronto, porque estuvimos muy aceleradas con las actividades diarias y de pronto sobreviene ese cansancio, que nos recuerda que necesitamos reponer energías, tenemos cerca un kiosco y ¿qué podemos elegir? Pues… ¡prácticamente nada!
© Martín Lustgarten
El nutricionista Martín Lustgarten indica que si están siguiendo un plan nutricional personalizado, sea porque se requiere bajar de peso o mantenerlo, o porque llevas una alimentación vegetariana o porque haces mucho deporte, es muy raro que algo de lo que haya o vendan en el kiosco le brinde los nutrientes necesarios para mantener el buen funcionamiento del cuerpo y los niveles de energía en alto.
© Martín Lustgarten
Dice Lustgarten que es común que a ciertas horas del día, el cansancio y la fatiga, atenten contra las mejores intenciones y la necesidad de aportar energía al organismo para poder seguir adelante, lleve a elegir productos procesados, llenos de azúcar y grasas, que resuelven rápidamente la necesidad de consumir calorías o calmar el hambre pero no aportan nutrientes de buena calidad. Por eso es importante tener siempre a mano opciones saludables para hacer colaciones que permitan llegar al final del día con un buen nivel de energía y sin un hambre voraz.
© Martín Lustgarten
Aquí unas recomendaciones del nutricionista Martín Lustgarten
- Los frutos secos son una buena opción. Puedes comprar los frutos secos y fruta desecada, semillas y cereales y luego dividir las porciones para cada snack en bolsitas pequeñas.
- Verduras crudas y cocidas. Se recomienda tener un envase con bastones o rodajas de zanahoria, pepinos, apio, pimientos rojos, verdes o amarillos, un tomate; incluso calabacin o berenjenas asadas que se pueden comer frías y para saborizarlas aún más, un chorrito de oliva o un acompañamiento de salsa de garbanzos o yogur natural o queso blanco con hierbas.
- Frutas frescas. Bananas, manzanas y naranjas. Fáciles de llevar en una bolsa y comer cuando se necesite y proporcionan azucares naturales de rápido efecto energizante.
- Un sandwich bien saludable. A la hora de una merienda, se puede hacer un sándwich o tostada de harinas integrales con yogur, manzanas, aguacate y un huevo.
© Martín Lustgarten
Lea también
Práctico plan para reducir el consumo de azúcar